Mis estimados visitantes…
16 de septiembre. Se conmemora el 213 aniversario de la gesta de Independencia. Héroes que nos dieron patria y libertad.
Pues bien. En el año 2006, se publico en el Diario Oficial de la Federación, un decreto mediante el cual, se modifica el artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo, referente a los días de descanso obligatorio.
En esta reforma mencionada, hay que destacar, que la intención del legislador, fue la de recorrer algunos de los días de descanso obligatorio, a fin de que algunos de ellos se festejen los días lunes.
Con tal modificación, se pretende ademas, incentivar la industria del turismo, ya que los trabajadores, en forma anticipada, pueden prever el asueto que disfrutaran en esos «puentes» que le han sido programados de antemano.
Los días cívicos que sufrieron modificación en esta reforma al art. 74, son:
* El 5 de febrero, conmemoracion de la promulgación de nuestra Constitución, que sera festejado el primer lunes de febrero.
* El 21 de marzo, conmemoración del natalicio de Don Benito Juárez, que sera festejado el tercer lunes de marzo; y
* El 20 de noviembre. Conmemoración de la Revolucion Mexicana, que sera festejada el tercer lunes de noviembre.
Como podrán ver, hay días que no fueron incluidos en esta lista: Por ejemplo, el 1 de enero (Año Nuevo), el 1 de mayo, el 16 de septiembre (motivo de este post); el 1 de diciembre de cada seis años, para el cambio de poderes presidenciales; el 25 de diciembre, por Navidad y los días que cada entidad federativa programe, para efectuar la jornada electoral en los estados.
Por tanto, hay que hacer la observación a nuestros colaboradores, que el viernes 15 septiembre, es un día normal de trabajo y que únicamente a aquellos trabajadores que llegaran a laborar el día sábado 16 setiembre, se les deberá remunerar con un salario doble por el servicio prestado.
Cada 16 de septiembre, conmemoramos el inicio de la gesta que un puñado de desadaptados… (válgame Dios Lic, pues ¿en qué estás pensando…??)
Perdón. Va de nuevo. Seré más respetuoso. Según nuestros libros de historia, el día del grito (que nunca ocurrió tal cosa, lo del grito), y quienes se levantaron en armas, fueron unos criollos (hijos de españoles), quienes descontentos de la opresión por parte de los españoles nativos, decidieron levantarse en armas (no es raro que ningún «mexicano natural» fuera el verdadero iniciador).
El «grito», en palabras de varios historiadores, no pasa de ser un ritual, del cual los que ejercen el poder, se aprovechan para a veces, un despliegue fatuo de opacidad y dispendio.
En fin. Sólo por un breve momento me desvié de mi especialidad y me adentré en los terrenos oscuros de la historia narrada por los vencedores.
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